El Centro de Atención a Trabajadores Temporeros de Alcalá la Real (albergue de temporeros) ha atendido en esta campaña a un total 134 usuarios de 11 nacionalidades. Se ha hecho dentro del programa de acogida humanitaria y alojamiento temporal dirigido a personas inmigrantes, un servicio que presta el Consistorio con la colaboración de la Consejería de Salud y Bienestar Social de la Junta de Andalucía. El programa también ha atendido a más de 300 personas, dentro del flujo de inmigrantes que solicitaban transporte para regresar a las ciudades españolas donde residen, dadas las pocas posibilidades de empleo en la comarca durante esta campaña.
La concejala de Servicios Sociales y Aldeas, María Villegas, ha afirmado que es un servicio “que se pone en marcha con la finalidad de cubrir las necesidades básicas de alojamiento y manutención de trabajadores temporeros, fundamentalmente inmigrantes, que acuden al municipio en busca de trabajo”. Villegas también ha explicado que “dentro las líneas que sigue el Ayuntamiento ante una situación de carácter social está la de promover la participación de todos los agentes implicados, de ahí que este Programa de Acogida Humanitaria a Inmigrantes haya contado con la inestimable colaboración de Cáritas y Cruz Roja que, un año más, se han movilizado solidariamente en torno a la problemática que afecta a tantos trabajadores temporeros”.
DESCENSO CON RESPECTO AL PASADO AÑO
Este centro ha tenido un descenso significativo de alojados con respecto al 2012, pues ha pasado de 265 a 134. Ha contado con personas usuarias de 11 nacionalidades, destacando, entre los países de procedencia, Marruecos (56), Senegal (18), Mali (16) y Argelia (14). También se han alojado personas, en menor número, procedentes de los siguientes países: España (10), Gambia (8), Rumanía (5) Mauritania (3), Guinea (2), Ghana (1) y Polonia (1),
Este centro, que funciona como alojamiento transitorio, ha contado con 18 plazas de alojamiento y ha sido atendido por un responsable, una mediadora intercultural, personal de servicios auxiliares y servicios de catering, vigilancia nocturna y voluntariado de Cáritas. En el centro se han ofrecido servicios de comida, aseo y lavado de ropa.
El centro ha cumplido así su principal objetivo: facilitar el alojamiento, hasta un máximo de tres días, a las personas, principalmente inmigrantes, que han buscado trabajo en la campaña de recogida de aceituna.