Subvencionado por la Junta de Andalucía, se desarrolla en todos los núcleos rurales y varios barrios de Alcalá hasta el mes de septiembre
El área de Servicios Sociales está inmersa en el desarrollo del proyecto centrado en el empoderamiento comunitario, financiado con fondos europeos Next Generation a través de una subvención de la Consejería de Inclusión Social de la Junta de Andalucía, y que ya ha empezado a girar por las aldeas y zonas con población vulnerable del núcleo urbano, con la finalidad de dinamizar y mejorar la calidad de vida de estos grupos de vecinos.
La consejera de de Inclusión Social, Juventud, Familias e Igualdad, Loles López, entregaba el pasado mes de agosto las resoluciones de las Líneas N-3 y N-4 (a a los que pertenece esta iniciativa) de los proyectos piloto e innovación de los Servicios Sociales Comunitarios y para la transformación tecnológica de los Servicios Sociales, convocatoria a la que el Ayuntamiento se había presentado, recibiendo cerca de 160.000€ para ponerlas en marcha.
En concreto, el proyecto sobre “Empoderamiento de la ciudadanía como herramienta de impulso de la convivencia y la inclusión social de los colectivos y grupos” cuenta con 69.802,00€ de subvención. El alcalde, Marino Aguilera, que ha asistido esta jornada a uno de los talleres impartidos en Ermita Nueva, acompañado del edil Baldomero Andréu, destaca que “es una iniciativa que está teniendo muy buena respuesta por parte de la población a la que se dirige, con talleres y propuestas muy dinámicas y variadas que Laura Amado y Laura Ibáñez coordinan e imparten con éxito, adaptándose al grupo y a sus necesidades” .
Se trata de talleres de competencias digitales, de memoria, atención y estimulación cognitiva, de cuidar al cuidador, primeros auxilios, dinámicas para superar la soledad en zonas rurales, rutas de senderismo o reconocimiento de las emociones, por citar algunos de los que ya se han puesto en práctica.
Así, los vecinos de Caserías de San Isidro, Villalobos, La Hortichuela, La Rábita, San José de La Rábita, Ermita Nueva, Mures, La Pedriza y Santa Ana, ya han podido participar en uno o varios talleres del proyecto. Esta semana está previsto desarrollar varias dinámicas en Ribera Baja, Villalobos, Ribera Alta y Mures.
La finalidad del proyecto, que se alargará hasta septiembre, es mejorar la calidad de vida de los vecinos que menos recursos o habilidades sociales tienen, fomentar su empleabilidad, facilitar su acceso a las nuevas tecnologías o promover hábitos de vida saludable, entre otros. En base a ese objetivo “desde diciembre se está promoviendo desde Servicios Sociales la participación de estos colectivos, con los que las propias coordinadoras y los pedáneos contactan y a quienes quiero agradecer su implicación y colaboración”, añade el alcalde.