Las mejoras han afectado a los caminos Viejo de Charilla, Cabeza del Carnero, de la Torre de la Dehesilla, de la Fontanilla, de la Jurada, de las Atravesadas y de la Ermita de San Isidro
El concejal de Agricultura y Medio Ambiente, Jesús Aguilar, informa que en días pasados se han terminado las obras de hormigonado de varios caminos rurales en Alcalá: Camino Viejo de Charilla, Camino de la Cabeza del Carnero, Camino de la Torre de la Dehesilla, Camino de la Fontanilla, Camino de la Jurada, Camino de las Atravesadas y Camino de la Ermita de San Isidro.
“Estas obras constituyen la primera fase de un proceso que tendrá continuidad en años sucesivos y cuyo objeto es eliminar zonas de tránsito especialmente difícil, tanto por pendiente como por su exposición a daños principalmente causados por la lluvia”, detalla Aguilar, que cifra en 90.550,03€ el importe total de las obras.
En esta última intervención se han arreglado siete caminos del municipio. Concretamente, 220 metros del Camino Viejo de Charilla, que puede considerarse una continuidad del pavimento de la calle Fernando de Tapia. Este tramo presentaba dificultades debidas al afloramiento de rocas del suelo, cada vez más pronunciado a causa de la erosión originada por la escorrentía de aguas de lluvia. Asimismo, se ha actuado en el Camino de la Cabeza del Carnero, eliminando un tramo habitualmente muy deteriorado por los derrames de agua del manantial y el estanque próximo al cortijo.
También se ha actuado en el Camino de la Torre de la Dehesilla, caracterizado por una fuerte pendiente y mucha pedregosidad. En este caso Agricultura se ha ocupado de eliminar un primer tramo de 350 metros, “facilitando con ello el acceso a las viviendas próximas, que antes de la intervención tenían extremadamente difícil llegar en días de lluvia. En fases sucesivas se hormigonará toda la cuesta, que cuenta con una longitud total de 1.000 metros”, añade el concejal.
Igualmente, se ha actuado en el Camino de La Jurada, hormigonando un tramo de 239 metros, especialmente dificultoso por su pendiente y pedregosidad. De esta forma, el camino, que forma parte de las rutas ciclistas de Alcalá, queda prácticamente hormigonado en su totalidad.
Otro de los últimos caminos mejorados es el de La Fontanilla, que se ha hormigonado en un tramo de 200 metros para eliminar la zona que más se embarraba por los derrames de la fuente. Con ello, se facilita tanto el paso de vehículos como el de peatones que peregrinan hacia la ermita de La Merced, evitando así su tránsito por la carretera y consecuentemente el riesgo de atropello.
En el caso del Camino de las Atravesadas, según explica Jesús Aguilar “se ha elevado la rasante para evitar la acumulación de barro, arrastrado por la lluvia de las zonas de cultivo colindantes y se ha hormigonado una curva especialmente peligrosa, con lo que también se ha conseguido minimizar las condiciones de deslizamiento”.
Por último, en el Camino de la Ermita de San Isidro se han construido dos badenes para facilitar el acceso a la ermita y zonas anexas de cultivo, eliminando la necesidad ejecutar obras de acondicionamiento recurrente cada vez que se celebran las fiestas de la aldea.
El concejal de Agricultura subraya que “se han construido aproximadamente 3.700 metros cuadrados de losa de hormigón armado para la mejora de estos siete caminos. Y, gracias a la licitación, hemos logrado un ahorro en las arcas municipales de casi 47.000€ sobre el presupuesto base, estimado en más de 136.800€. Esa cantidad de 47.000€ se destinará al arreglo de más caminos, como el primer tramo del Camino de la Torre de la Dehesilla, para enlazar con lo que se ha hormigonado ahora”.