El Consistorio ha adquirido un inmueble ruinoso ubicado en calle Real 46 como ya hiciera con la casa contigua, ya derruida
El Ayuntamiento, dentro de la política de recuperación del casco histórico, tiene la intención de incorporar a su patrimonio una serie de inmuebles en estado ruinoso para, una vez demolidos, dotar de equipamientos básicos de los que carezca su entorno y destinarlos a zonas de esparcimiento, al tiempo que embellecen el paisaje urbano.
En base a este objetivo, la Junta de Gobierno Local celebrada esta semana, ha aprobado la adquisición del inmueble ubicado en calle Real nº 46. Una casa en estado de ruina, que linda a su derecha con la conocida Casa Pineda, y a su izquierda con un inmueble ya demolido y que el propio Ayuntamiento había adquirido con anterioridad, para “ofrecer un espacio abierto y público a estos vecinos, en la confluencia de las calles Real y Oteros. Un entorno cargado de historia al que queremos dar vida, apostando por revitalizar no solo la parte baja y más céntrica del casco antiguo sino también su parte alta”, subraya el alcalde y concejal de Patrimonio, Marino Aguilera.
Sobre la casa recientemente adquirida pesa un expediente de declaración de ruina y un procedimiento de ruina inminente. Una vez demolida, permitirá al Ayuntamiento “dar la solución arquitectónica propuesta, para solventar el borde de esa manzana que dará fachada a la placeta”, según reza en la propuesta aprobada en la citada Junta de Gobierno Local.
Los solares mencionados suman, junto a los metros de la propia placeta, una superficie de unos 550 metros cuadrados. A esa política de recuperación del casco histórico, se añade la creación de aparcamientos, la adquisición de la Casa de Fernando de Tapia para crear un centro educativo y cultural y la aprobación del convenio urbanístico para la recuperación del Toril.